martes, noviembre 16, 2004

El problema es la ley y no los salvajes de las empresas que venden combustibles (¿?)

Así quedaría resumida la intervención de César Hildebrandt (La Boca del Lobo), que terminó echándole la culpa a los taxistas petroleros que queman combustible diesel.

Ayer, martes, La boca del lobo le dio espacio a la campaña del SENATI por combustibles limpios. En ella se explicó de que manera el azufre hace estragos en los motores diesel. Y se dio a conocer la recolección de firmas para modificar la ley que permite esa atrocidad. Vea la secuencia (Real Media File). (Fuente: Frecuencia Latina) - 15 de noviembre 2004

Pero si la ley es para que los máximos niveles de azufre sean cambiados, entonces, ¿la reprimenda no debería ser para los inhumanos de los directivos que manejan las empresas petroleras y que suministran los grifos del país? ¿No sería saludable y hasta daría "buena imagen" ahora que esta de moda en los medios hablar de responsabilidad social de las empresas, que una de esas petroempresas (alguien dijo ¿SHELL? ¿YPF? ¿REPSOL?¿PETROPERU? tomase la iniciativa e implantase un control de calidad que redujese las partículas por millón?

Nuevamente la nota fue tácita, y sin nombres de empresas que venden combustible tan bárbaramente lleno de azufre.

Aquí encontre un caso de azufre con NOMBRE:
La Shell ofrece disculpas a sus clientes. (EEUU)

La campaña de SENATI por combustibles limpios

Bruselas propone combustibles sin azufre (2001)

"Falta difundir los beneficios del TLC" (¿?)

Así titula hoy el Diario EL COMERCIO , una nota en el interior de la sección B, (con llamada en el último rincón de la portada - derecha inferior). Si bien la encuesta sobre la información que maneja la población acerca del tratado de libre comercio es reveladora, el diario opta por dar opinión sobre las consecuencias de un TLC, resaltando tan solo los "beneficios" en su titular.

Además EL COMERCIO omite que, muy probablemente, no se conozcan estos supuestos "beneficios" o perjuicios por las cláusulas de confidencialidad establecidas por EEUU, que sumen en el secreto las negociaciones de un tratado que debería ser público por su interés y sus consecuencias a nivel nacional.

Artículo de El Comercio con cifras de la encuesta sobre el TLC